recorrer tu cuerpo a besos para luego mirar a tus ojos calientes

brillantes cual sol fresco del medio día

me tomaría toda la eternidad olisqueando el aroma irresistible de tu piel

recorrer tu cuerpo a besos como el curso del fuego en un voraz incendio

apagando tu sed y la mía

 a los latidos impetuosos de nuestros corazones

convirtiéndonos en un poema entrelazando nuestros cuerpos

como si fueran las rimas

recorrer tu cuerpo a besos cautivándote con mi deseo

excitándote al punto que ardas de placer

recorrer tu cuerpo a besos atrayéndote para que no puedas

dejar de pensar en mi

para que abrazados nos movamos libres

yo insertándome en tus secretos y tu suspirando de amor

recorrer tu cuerpo a besos es el deleite

el pan que me nutre, el manjar y la almendra