gotas al fuego al refresco de la lengua y las frases sobre tu piel

linda eres mujer de encanto y profundamente determinista

al rubor de los tímidos a la moneda fría y el hielo

a los románticos

lujuriosa y tierna al que con estrofas y daga

hiere tu cuello con la picardía de una caricia

picantes, dulces, y deleitablemente jugosos

se ponen tus labios al poema desnudo

al incendio sarcástico, al salvaje zumbido

y sacudón

al suave toque de los dientes

y al apretón en las curvas

a la silueta de los dedos sobre una guitarra

al resbalón distraído y aceite

al levantamiento, a la lucha, a la resistencia

al vigor del atardecer

y al vencimiento frente al mar

al batido del viento, cabellos revueltos

y olas refrescantes