ahora vienes a mi queriéndome

me haces señas con la profundidad de tu mirada

me invitas con la suavidad de tus labios

porque sabes que soy como un niño

me ofreces los mapas de tesoros escondidos

adornos empañados en misterio

palabras dulces como golosinas

y los recuerdos se deshacen

saliendo al presente

vienes a mi me tomas de la mano

me llevas a las sombras

me fundo en la llama de tu cuerpo

los secretos siguen siéndolo

con las habitaciones abiertas

y las sabanas en el piso

vienes a mí con la máscara de inocencia

con besos tiernos

 con palabras desgastadas         

vienes a mi invitándome al laberinto de la lujuria

y yo me pierdo al escuchar tu voz.